Los vieneses, acostumbrados como deben estar a ver peces-bola gigantes en sus vagones de metro, ni miraban.
Sed buenos. Si podéis
AurelianoBastida
(Vídeo: pez gigante en Karlpaltz, en la U4, Viena, Austria)
Los vieneses, acostumbrados como deben estar a ver peces-bola gigantes en sus vagones de metro, ni miraban.
Sed buenos. Si podéis
AurelianoBastida
(Vídeo: pez gigante en Karlpaltz, en la U4, Viena, Austria)
Para ponerle huevos a un árbol de Navidad, nada mejor que visitar Südtirol.
Porque allí gente con mucho tiempo libre se dedica a vaciar huevos con tesón, a decorarlos con paciencia, y a amontonarlos en ingentes cantidades en tiendas de huevos pintados.
(Si en vez de pensar en huevos de gallina, pensáis en otros huevos cualesquiera, la afición adquiere un cariz bastante más divertido).
Están locos estos austriacos.
Eso sí, tienen los árboles de Navidad más valientes.
Sed buenos. Si podéis.
AurelianoBastida
(Foto: tienda de huevos pintados, Salzburgo, Austria)
Aparte de existir, añadiría que incluso es bonito. A pesar de que la temperatura más alta que hemos alcanzado apenas ha superado los 0º, o que cobran entrada casi hasta en el hotel.
La Navidad llena aquí cientos de mercadillos callejeros. Por mi parte nunca había tenido la oportunidad de decirle claramente a la cara lo que pienso de ella: ¡perra capitalista!
Sed buenos. Si podéis.
AurelianoBastida
AurelianoBastida
(Foto: Cementerio [vale, es un cementerio... pero ¡tan bonito!] de Alpbach, Austria)
Después de un interminable viaje en tren de 13 horas, de noche y sin dormir, alcanzo con dos maletas, un macuto, mi mochila y el portátil la gélida ciudad de Viena.
Aquí, como en el CorteInglés, ya es Navidad.
Si alguien me necesita próximamente puede encontrarme en el número 7, ya sabéis de que calle, en Innsbruck.
Sed buenos. Si podéis.
AurelianoBastida
(Foto: Rathausplatz, Viena)
Ha sido una visita repleta de mitos y tópicos. Desde gemir (a gritos, os lo aseguro) de gusto, por la calle, con un helado a tener destrozaditos los pies. Desde quejarse porque me echo la siesta a castigarme sin ir al cine.
Pero ha sido un gran viaje. Hemos visitado juntos el Reino del Tiramisú, y comido arancini y canoli cerca de Piazza Bologna, haciendo el aperitivo como romanos.
Incluso se ha comprado un libro.
Cuando fui a pedirlo, el vendedor no estaba seguro de si yo sería capaz de soportar tanta ñoñería, y se dedicó a advertirme sobre el posible vomitivo contenido de lo que me disponía a adquirir. Lo malo es que habrá quien lo disfrute.
Ci vediamo presto!
Sed buenos. Si podéis
AurelianoBastida
(Foto: Haciendo fotos con una colegui, Palatino [bostezo], Roma)
Dice un amigo a otro:
- ¿Qué hace una monja dentro de una tienda de souvenir?
- ¿Pedir para los pobres?
- ¡No! Vender... Bueno... Y enfadarse porque le hacen fotos.
Sed buenos. Si podéis.
AurelianoBastida
(Foto: La monja del chiste, Ciudad El Vaticano)
En las páginas de un libro ("Tengo ganas de ti") una joven pareja colgaba, como símbolo de su amor eterno, un candado en este puente, lanzando después la llave que lo abría al río Tíber.
Cientos de parejas en Roma, desde entonces, hacen lo mismo.
Una mariconada, sí. Pero bonito en cierto modo.
Y, lo mejor: sacado de un libro.
a
Sed buenos. Si podéis.
AurelianoBastida
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(Foto: Ponte Milvio, Roma)
Me imaginaba que este país, que esta ciudad, vivían la religión fervorosamente. Me hacía a la idea de encontrarme curitas calvos, monjitas bigotudas y frailes con los pies descalzos pidiendo limosna en el metro.
Pero esto sí que no me lo esperaba.
La escena impagable: una mujer bailando mientras es poseída por una paloma.
Sed buenos. Si podéis.
AurelianoBastida
(Foto: Cartel, Roma)
Uno se da cuenta de lo deprimente que es su vida antes de la Erasmus cuando el primer personaje conocido que se encuentra al regresar es a Larrúmana de Diego de León.
Al menos, eso sí, en el tiempo que llevo fuera ha aprendido una nueva canción.
De lo más animado, por cierto.
Sed buenos. Si podéis.
AurelianoBastida
(Foto: Larrúmana de Diego de León, Madrid)
Increíble. Sencillamente.
Sed buenos. Si podéis.
AurelianoBastida
(Foto: Concierto de Extremoduro, Palacio de los deportes, Madrid)
He vuelto. Pero por poco.
Contadas con los dedos de una mano son las personas que pueden presumir de llegar a un aeropuerto a las 9:49 para coger un avión que sale a las 10:00. Y conseguirlo.
No es un decir, no, que somos cinco: 3 italianos, un inglés y yo.
Nos han puesto uno de esos autobuses que recorren las pistas sólo para nosotros.
Sed buenos. Si podéis.
AurelianoBastida
(Foto: Yo volviendo, Capri)
Nos han convertido en adictos. Empezaron regalándolos después de cada sesión de cine, todos los miércoles... Luego empezaron a cobrar una cantidad irrisoria. Ahora, con el cambio de cine, han dejado de traerlos. Y nos obligan a vagar como toxicómanos al acabar la película en busca de una pastelería abierta, para poder saciar nuestro mono de corneto.
¡Pero están tan rellenos de chocolate!
Sed buenos. Si podéis.
AurelianoBastida
AurelianoBastida
(Foto: Churros gratis y otros trofeos, Perugia)
Esta es Almería. Apareció, sin saber cómo, un día velando mi sueño. Han aparecido palmeras similares a la vera de varios estudiantes Erasmus, y algunos sospechan que son figuras similares al cristiano ángel de la guardia.
Tratando de reconstruir los hechos, parcialmente oscurecidos por un velo de alcohol bastante tupido, la procedencia probable de Almería es un camión interpuesto entre un bar con barra libre hasta las 2:30 y la parada del nocturno.
El resto os lo podéis imaginar.
Sed buenos. Si podéis.
AurelianoBastida
(Foto: Almería, Roma)
En este lugar, en el que la pasta constituye el 102% de la alimentación de los nativos, he de explicar dos cosas fundamentales:
1) Está mal visto comer gli spaghetti con cuchara para enrollarlos más fácilmente.
2) La conocida expresión al dente, puede traducirse por dura. Así, pasta al dente puede ser traducido, de manera literal, por pasta dura, que es como gustan comer aquí los macarrones. Los ponen en los platos casi crujientes.
Se dice que Rómulo perdió varios dientes intentando masticar unos ravioli sin cocer, o, como se dice en italiano, aún más al dente. Probablemente a esta leyenda se deba el nombre de l0 que debería, en realidad, llamarse cocción incompleta.
Sed buenos. Si podéis.
AurelianoBastida
(Foto: tienda de alimentación, Nápoles)
Esta vez no ha sido por quedarme dormido, sino por escribir un mensaje. En realidad sólo me había pasado una parada, pero eso yo no lo sabía, y he dado muchas vueltas, incluidos varios autobuses, hasta encontrar el camino de regreso.
Empiezo a plantearme la posibilidad de un cierto retraso mental.
Sed buenos. Si podéis.
AurelianoBastida
(Foto: Algún lugar desconocido, creo que via Collatina, Roma)
Hoy me he quedado dormido en el bus de regreso al hogar.
Como traía bien aprendida la lección de casa, he decidido quedarme hasta el final, esta vez sin vomitar, y esperar a que volviera a algún lugar conocido.
Lo que no he tenido en cuenta es que mi búho atraviesa los confines de Roma (quién sabe si del mundo), y finaliza su trayecto cerca de un barranco ignoto al final del cual se ve un mar oscuro, con un gran remolino, con un barco en el centro, en el cual me pareció distinguir a Allan Poe.
He hecho varias fotos: espero haber elegido la más descorazonadora.
Sed buenos. Si podéis.
AurelianoBastida
(Foto: Paisaje desolador del fin del mundo, o final del trayecto del n23, Roma)
Tras el sonado sciopero, de repercusión internacional, comienzan las clases.
Mi primera experiencia ha sido bastante negativa, pero como dicen que la primera siempre duele, estoy tranquilo. A primera hora no pude ir porque mi compañero de piso hizo lo que de él dependió para que no pudiera llegar a tiempo; a la siguiente sí fui.
Desgraciadamente, en el aula donde me había dicho la profesora que estuviera, no tuvo lugar su clase, sino una de química que yo aprobé en segundo. Comprobé, no obstante, con orgullo, que me acordaba de todo.
Sed buenos. Si podéis
AurelianoBastida
(Foto: rectorado de La Sapienza, Roma)
Os parecerá increíble. Por lo menos yo no sabía que se podía tener papada en la nuca...
Lo mejor de este señor, es que iba vestido con un chándal de las olimpiadas.
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Sed buenos. Si podéis.
AurelianoBastida
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(Foto: mejicano en el autobús, Roma)
Aún a riesgo de parecer, o, si cabe peor, de ser repetitivo, os narro de nuevo mis aventuras con la piscina. Pues bien: en el capítulo anterior os contaba cómo después de llegar a Tor di Quinto, 64, y descubrir que no era una dirección, me rendía.
Hoy, sin embargo, he vuelto envalentonado. Gracias a los mapas a vista de pájaro había descubierto que había más piscinas, todavía más allá de donde me aventuré a llegar. En efecto, una de estas piscinas era la de La Sapienza. Lamentablemente no he podido apuntarme: necesitan un certificado médico, por el que tienen pensado cobrarme 18 euracos.
Aunque, siendo sinceros, prefiero eso a que me corte la cabeza la Reina de Corazones.
Sed buenos. Si podéis
AurelianoBastida
(Fotos: "Portal" 64, viale Tor di Quinto, Roma; un poco más alante por la misma carretera)
Queridos hermanos:
En tan apropiado día, me gustaría que recordáramos todos juntos al transporte públco romano. Cierto es que era lento, sucio. No es menos cierto que olía mal. Pero no tengáis en cuenta, hermanos, al búho de vuelta a casa que pasa cada 45 minutos, o al metro que cierra a las 23.30. Evocad, en cambio, al abono transportes para jóvenes menores menores de 26 que cuesta sólo 18 euros... Hacedle el hueco que merece en vuestras plegarias.
Sed buenos. Si podéis.
AurelianoBastida
(Foto: Autobús muerto, con la consecuente inscripción de Descanse En Paz, Roma)
Historias y deshistorias de un Erasmus en la Ciudad Eterna
AurelianoBastida
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Desde Villalacia del Cerro,
para el mundo
El Roto ha dicho:
¡Busca!
